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DIARIO DE LEON
Badiola garantiza que los casos de vaca loca en animales se contagiaron antes del 2001
El presidente del consejo español de veterinarios señala que pueden aparecer más reses infectadas
El científico leonés cree que el traspaso materno de vaca a ternero podría ser otro foco de contagio
Ana Gil león
El presidente del Consejo de Colegios de Veterinarios de España, Juan José Badiola, señala que los casos de Encefalopatía Espongiforme Bobina (EEB) en animales que han aparecido con posterioridad al 2001 se contagiaron de esta enfermedad antes de esa fecha.
Precisamente en el 2001 fue cuando en España se puso en marcha el plan de vigilancia para evitar la entrada de carne contaminada por el conocido comúnmente como mal de las vacas locas. Para ello, se retiraron las harinas elaboradas con carnes y huesos de animales con las que se fabricaba el pienso para estos rumiantes y que son las verdaderas responsables de la enfermedad, tal y como explicó Badiola.
Sin embargo, desde entonces se han seguido registrando vacas infectadas por esta patología, si bien no han llegado a la cadena alimentaria gracias a los controles establecidos por este plan cuyo protocolo ya es común en toda Europa.
La aparición de estos nuevos casos de vacas locas responde a la diferencia en el periodo de incubación de la enfermedad, que «varía mucho de unas reses a otras», explica Badiola. En este sentido, el presidente de los veterinarios españoles matizó que «es muy importante ver la edad» de las vacas infectadas. Ésta ha variado en los últimos años y de entre los cuatro y seis años con los que contaban las reses en los primeros casos descubiertos en España se ha pasado ya a entre los seis y los nueve años.
Reses mayores
«Que aparezcan ahora vacas enfermas es raro porque se eliminaron las harinas de carnes y huesos contaminados, pero entre los casos que aparecen, se aprecia que las vacas son mayores que las que aparecían en un principio», esgrime Badiola.
A pesar de ello, matiza que «lo preocupante es que apareciera en vacas jóvenes», si bien considera «muy improbable» que se produzcan en reses de menos de 30 meses.
El fin de la encefalopatía espongiforme bovina «no es fácil» y Badiola no descarta seguir encontrando casos en los próximos meses de vacas contaminadas por esta patología.
La Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB) es el nombre científico del mal de las vacas locas y fue diagnosticada por primera vez en el Reino Unido en los años 80. De ahí parte de la enfermedad.
«El fin de la encefalopatía espongiforme bovina no es fácil y seguiremos encontrando casos»
JUAN JOSÉ BADIOLA
Presidente del Consejo de Veterinarios
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Badiola garantiza que los casos de vaca loca en animales se contagiaron antes del 2001
El presidente del consejo español de veterinarios señala que pueden aparecer más reses infectadas
El científico leonés cree que el traspaso materno de vaca a ternero podría ser otro foco de contagio
Ana Gil león
El presidente del Consejo de Colegios de Veterinarios de España, Juan José Badiola, señala que los casos de Encefalopatía Espongiforme Bobina (EEB) en animales que han aparecido con posterioridad al 2001 se contagiaron de esta enfermedad antes de esa fecha.
Precisamente en el 2001 fue cuando en España se puso en marcha el plan de vigilancia para evitar la entrada de carne contaminada por el conocido comúnmente como mal de las vacas locas. Para ello, se retiraron las harinas elaboradas con carnes y huesos de animales con las que se fabricaba el pienso para estos rumiantes y que son las verdaderas responsables de la enfermedad, tal y como explicó Badiola.
Sin embargo, desde entonces se han seguido registrando vacas infectadas por esta patología, si bien no han llegado a la cadena alimentaria gracias a los controles establecidos por este plan cuyo protocolo ya es común en toda Europa.
La aparición de estos nuevos casos de vacas locas responde a la diferencia en el periodo de incubación de la enfermedad, que «varía mucho de unas reses a otras», explica Badiola. En este sentido, el presidente de los veterinarios españoles matizó que «es muy importante ver la edad» de las vacas infectadas. Ésta ha variado en los últimos años y de entre los cuatro y seis años con los que contaban las reses en los primeros casos descubiertos en España se ha pasado ya a entre los seis y los nueve años.
Reses mayores
«Que aparezcan ahora vacas enfermas es raro porque se eliminaron las harinas de carnes y huesos contaminados, pero entre los casos que aparecen, se aprecia que las vacas son mayores que las que aparecían en un principio», esgrime Badiola.
A pesar de ello, matiza que «lo preocupante es que apareciera en vacas jóvenes», si bien considera «muy improbable» que se produzcan en reses de menos de 30 meses.
El fin de la encefalopatía espongiforme bovina «no es fácil» y Badiola no descarta seguir encontrando casos en los próximos meses de vacas contaminadas por esta patología.
La Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB) es el nombre científico del mal de las vacas locas y fue diagnosticada por primera vez en el Reino Unido en los años 80. De ahí parte de la enfermedad.
«El fin de la encefalopatía espongiforme bovina no es fácil y seguiremos encontrando casos»
JUAN JOSÉ BADIOLA
Presidente del Consejo de Veterinarios
F. Ramos / A. Gil / L. Urdiales 
redacción 
Los beneficios de beber cantidades adecuadas de agua (ya no sólo los dos litros conocidos, sino según sudoración, trabajo y, en definitiva, las necesidades particulares de cada individuo) son innumerables.
El alcohol es una sustancia cuyo consumo requiere de extremos cuidados, ya que su ingesta moderada puede recaer en grandes beneficios e incluso complementar las bondades del ejercicio físico, pero un poco demás puede ser realmente nocivo y alterar la práctica de deportes.
