Que España es un centro importante de producción y consumo de aceite en nuestros días es algo que admite pocas dudas. Este alimento tiene una larga tradición peninsular. De hecho, ya comentamos en su momento de qué estaba hecho el monte Testaccio de Roma. Pero, en todos estos siglos ha habido momentos en los que el aceite ha sido denostado.
Por ejemplo, en la España del siglo XVI, la comida española, aparte de muy especiada y abundante en pimienta, tenía poco aceite. Se solía sustituir por manteca de cerdo y tocino a la hora de cocinar.
Por ejemplo, en la España del siglo XVI, la comida española, aparte de muy especiada y abundante en pimienta, tenía poco aceite. Se solía sustituir por manteca de cerdo y tocino a la hora de cocinar.
El motivo no era otro que la asociación del aceite con las culturas árabe y judía. Esto era suficiente para dejar este alimento de lado y así remarcar la buena cristiandad de uno.
Fuente: Vivir en el Escorial, de Carlos Carnicer